28 de enero de 2011

Resena: Bob Dylan - The Times They Are A-Changin' b/w Like A Rolling Stone

Bob Dylan
The Times They Are A-Changin' b/w Like A Rolling Stone
(Columbia Legacy, 2010) 7" single, acetato rojo

“Solo un cosa rítmica en papel”. La frase icónica de ese judío gangoso que naciera bajo el nombre de Robert Zimmerman y que 44 años después existen cientos de investigaciones, artículos, ensayos, historias y eventos relacionados, dedicados y existentes gracias a aquel pedazo de ritmo en papel.

El sur en particular siempre ha sido un lugar bastante ofusco; aun el día de hoy es quizás una esquina enorme olvidada en la nación estadounidense; aun así pareciera que el contacto abrupto producía el despertar inquisitivo de otros: “Naces, tu sabes, nombres equivocados, padres equivocados, suele pasar” y así nacería Bob Dylan: aquel chico de despertar inquisitivo que tenia la ambición de retener la chispa del rock & roll hasta que conoció el folk de su tierra natal y se uniria al circuito folkie de Dinkytown. Dylan, un hombre de intachables principios, siempre ha permutado su trabajo de maneras diferentes (inclusive en aquel tropiezo con Cristo); todo ese bagaje lo contenía de alguna manera u otra: aquellos viajes por el sur, los campos, las comunas negras, los ríos y las recamaras de bronce; pero cuando Dylan movio su cabeza, la vida moderna le “Fumaria sus parpados y golpearía su cigarro”; prácticamente le vomitaría la urbanidad y ese sureño joven de ojos claros se alimentaria de la labia del pueblo que el mismo estaba viendo en decadencia; no antes haciendo diferentes paradas.

En 1961 Dylan se mudo a NY, “Si quieres dinero en el bolsillo, un sombrero en la cabeza, comida caliente en la mesa y una sabana en tu cama, ven a Nueva Yok” decía Tom Waits. Asi, Bob termino en el hospital psiquiátrico Greystone, donde su ídolo Woody Guthrie estaba padeciendo gravemente la enfermedad de Huntington. Guthrie, quien ya había dejado su máquina asesina de fascistas tiempo atrás, serviría de mentor para Dylan quien sentía gran admiración por el músico; inclusive, subsecuente a su fichaje en Columbia ese mismo año y el lanzamiento de su primer disco homónimo en 1962, solo dos canciones incluirían la autoría del mismo, siendo una de ellas el ya clásico Song For Woody. El verdadero golpe fue entonces su segundo material: The Freewheelin' Bob Dylan. En solo un año ese joven se convertiría en un mesias insolito de lo que ya se le iba conociendo como el folk de protesta; igualmente musical como contestatario, Dylan siempre sostendrá sobre sus hombros muchas quejas y demás; paso lo mismo en The Times They Are a-Changin' y Another Side Of Bob Dylan, pero el temerario se hizo de mucho valor cuando lanzo en 1965 el Bringing It All Back Home, con Sally Grossman aun lado de el y sus discos de Robert Johnson y Ravi Shankar: era el cambio, el mesías había roto y marginado su puesto; porque eso no le venía a bien. Dylan quería ser mas real y cambiar la forma en la cual se entendía el “Rock”; ese ritmo contagioso que el mismo quería administrar a masas de la manera con la cual administraba su protesta con armónica y guitarra de palo.

Cuando, al final de ese mismo año, el silencio se rompería y le gritaran Judas, Dylan estaba ya sobando las barbas del creador con todo y gafas obscuras puestas. Highway 61 Revisited vería la luz de manera asombrosa; esa impresión que deja escuchar el primer golpe de batería, aquella comandada por Bobby Gregg, es similar a la de un llamado; la historia del rock había sido llamada al estrado. Y es que aquella primera toma de lo que se convertiría en la canción inicial del disco, es ahora un tema épico; aquel poema que Dylan escribiría en 20 páginas como “vomito” y que nunca pensó existiría como canción. Aquella canción que lo cambiaria todo cuando Tom Wilson encabezara la grabación el 15 y 16 de Junio de 1965.

Like a Rolling Stone dejo un legado musical y lirico; quizás uno de los mas importantes históricamente hablando; y sin duda Dylan le debe tanto a esa “cosa rítmica en papel” como todos los demás que siguen forjando su futuro bajo las alas de lo que hoy conocemos como “rock”. A finales de 2010, Sony Legacy editaría casi a la par dos ítems solemnes de Dylan; los demos que grabaría para la marca Witmark y una caja que contiene sus seis primeros LP’s en sonido mono aural y parte de la celebración ha sido la introducción de un single conmemorativo con los dos sencillos mas icónicos del cantante; su inicial The Times They Are A-Changin' en una curiosa versión bastante emocional al piano salida de los demos de Witmark y ese tema inicial de aquel Highway 61 Revisited, Like A Rolling Stone, en glorioso sonido mono, como fue grabada y lanzada originalmente en 1965, todo en un acetato rojo de 45rpm y siete pulgadas de edición limitada.