(Byelobog Productions, 2011) LP, transparente, Ltd
William-Adolphe Bouguereau, pintor tradicionalista que sufrió el abrazo del público general al Impresionismo a finales del siglo 19 y el olvido del tradicionalismo como escuela. Apreciada de manera limitada, su obra callo en el olvido tras su muerte en 1905 y reapareció años después cuando la ola francesa terminara y se continuara retomando artistas ajenos a tal vertiente. La segunda ola del black metal, la cual se origino y extendió por todo el terreno noruego durante la última década del siglo 20 callo de alguna forma similar a Bouguereau; pero, con las condiciones sociales como restricción general en debate al comportamiento de la escena noruega, era normal que sucediera de esa manera. Siempre incómodos, los participantes de esta escena nunca se vieron tentados por el reconocimiento formal; no fue hasta que el movimiento tomo cauces diferentes cuando los medios exteriores comenzaron a distribuir noticias, y localmente hacia más ruido la actividad delincuente, socialista y extremistas que la música creada por este puño de jóvenes.
Por ejemplo, durante un periodo comprendido desde Mayo de 1992, hasta Noviembre de 1995 se quemaron más de cincuenta iglesias; Varg Vikernes, mejor conocido como Burzum, fue encontrado culpable de la quema de tres de ellas, además del asesinato de Øystein Aarseth, guitarrista de Mayhem y condenado a 21 años de prisión de los cuales (con intento de escape incluido) solo cumpliría 15: Fallen, su octavo disco y el segundo después de cumplir su sentencia ante la ley noruega, no cae muy lejos de sus intentos anteriores.
“Incapaz de crear algo que no suene a Burzum” Vikernes es honesto con su material. Fallen cae en el mismo plano de sus anteriores intentos, parentesco aparte con los dos discos ambient que hizo durante su estadía en la cárcel al serle negado el uso de guitarras y batería, mas sin embargo recorre un camino diferente; su parentesco tanto sugiere su conexión musical como alarga su dirección opuesta: en Belus era obvio que Vikernes tenía algo mas en mente, aun dentro de los cánones del black metal, pero termina fundiéndolo de una manera aun más fuerte y exacta en Fallen; la mitología, las supuestas carreras existenciales y un sonido estimulante que proporciona inflexiones aun más interesantes que su antecesor: las vocalizaciones limpias y los parámetros menos extendidos de las piezas; por ejemplo, mas exigiendo la respuesta directa, la cual, sería curioso conocerla, si es que Virkernes continua asediando la comulación personal o si en realidad le interesa forjar una clase de seguimiento ideológico a los pensamientos que le acongojan.